¡ LA CUENTA ATRÁS!

Y fueron pasando días, semanas y meses hasta encontrarnos solo con tres dias por delante para acabar el curso. Aún así seguimos con nuestra rutina diaria de trabajo: lectura, una ficha de Lengua, una de Mate, un dictado bastante completo y un ratito también para jugar con plastilina, hacer dibujo libre, coloreado...Me sorprende, a veces, que parezca que trabajen con las mismas fuerzas que al principio de curso, sobre todo a primera hora de la mañana, después, según van pasando las horas el cansancio acumulado lógicamente aparece; pero yo todavía sigo sorprendida, su curiosidad y su alegría no desaparecen en toda la jornada. Son los niños para mí seres extraordinarios. Siempre les deseo que el paso del tiempo, por mucho que éste sea, no les desgaste esa felicidad con la que viven todos los momentos porque creo que en eso consiste verdaderamente VIVIR.

¡LA DIDÁCTICA VISITA DEL VIERNES PASADO!

El viernes pasado, a raíz de un dictado que hicimos sobre el mundo egipcio, tuvimos la agradable y entretenida visita de un alumno del cole de 5º curso, hermano de Sofía, una niña de nuestra clase, Jorge Corral Vázquez, quien nos expuso con toda claridad y con un vocabulario adaptado a los alumnos y alumnas de 1º, algunas costumbres y modos de vida de los egipcios. Jorge es un verdadero entendido en este tema, pueblo antiguo que le apasionó, por lo menos, desde que yo fui su tutora cuando estaba en 2º. Vuestros hijos e hijas le atendieron motivados y, al final de su charla, le hicieron preguntas sobre el tema. Yo fui oyente y espectadora y os puedo asegurar que en ese rato ellos no eran niños eran adultos en una sala de conferencias donde los asistentes eran almas infantiles llenas de curiosidad. Mereció la pena estar allí. De verdad que sí. Gracias Jorge.

¡ Y SIGUEN TRABAJANDO...!

En esta última semana vuestros hijos e hijas trabajaron muy alegremente, demostrando esa alegría no solo en sus gestos sino en su actitud ante las actividades propuestas para cada día: trabajo y conversación, conversación, conversación...Hablaron como "cotorrillas", dicharacheras y risueñas. A veces, bastantes veces, les llamé la atención, mas, al tiempo que les pedía un poco de silencio, comprendía que, llegadas estas alturas del curso, el cansancio, desconozco el porqué, aumenta las ganas de compartir con el compañero o la compañera de mesa cualquier asunto, por muy trivial que éste sea, comentario que ,por algún motivo que ignoro, se traslada a todos los niños y niñas de la clase. Están cansados, creo que la gran mayoría ha trabajado mucho y muy bien durante todo el curso. Solamente les pediría un último esfuerzo final: que no dejen de leer ni un solo día, porque cuando alguno de ellos lo hace, a la hora de la lectura conmigo no muestran la soltura que tienen cuando la traen ya muy leída de casa. Y lo pasan mal por mucho que yo les digo que estén tranquilos. Apenas nos queda un suspiro de este primer curso de primaria, pero me gustaría que hasta el último día su respiración fuese fuerte como ha sido hasta ahora. La persona que comparte el aire con los niños sabe que su cuerpo se nutre no solo de oxígeno. Sé bien a lo que me refiero y agradezco, de corazón, su compañía.

¡UNA GRAN ORQUESTA!

El pasado viernes los alumnos y alumnas de cinco años, así como primero y segundo de primaria asistieron a singular concierto en el Conservatorio en donde el protagonista, además de cada instrumento, fue un ratoncito especial, encargado de acercar la música a cada niño y niña que con su instrumento personalmentes, siguió muy atentamente las palabras del ratón y de cada músico que salió al escenario para hablar del instrumento que enseña a tocar en el Conservatorio. Creo que fue un concierto didáctico muy entretenido. Vuestros hijos e hijas cantaron las canciones que habíamos preparado durante la semana dedicadas a Pololo, la profesora de flauta travesera que muy ingeniosamente hizo el papel de ratón. Supieron de maravilla el nombre de cada instrumento presentado y demostraron ser, además de buenos cantantes, buenos oyentes. Cualidad que hace más sabio al que la posee. ¿O no?

¡ NUNCA NOS GUSTÓ LA PALABRA CAÑÓN!

Es palabra que recuerda a guerra, violencia, dolor...Pero también es la palabra que nombra al proyector de nuestra pizarra mágica y será una tontería mía, estoy segura, pero desde el día que comentamos en clase que ya podrían haberle puesto otro nombre más bonito, os aseguro, con la seguridad que pueden dar los pensamientos irraccionales, que el cañón dejó de funcionar como debiese. Quiere esta afirmación decir que en medio de la visión de un documental o mientras hacemos los ejercicios del libro en la pizarra el proyector de nombre guerrero deja de emitir imágenes para dejarnos solo con la compañía de unas rayas multicolores que molestan bastante o con la visión de unos pajaritos que publicitan la marca del cañón. Vuestros hijos e hijas y yo misma estamos un poco decepcionados con el comportamiento de este aparato que parece querer dejarnos, demasiado a menudo, con ganas de seguir contando con su luz. Las quejas están dadas al servicio informático, ahora solamente nos queda esperar una visita que nos devuelva la fe en las nuevas tecnologías.

¡SE VAN CAYENDO TANTOS DIENTES...!

Hoy vuestros hijos e hijas hicieron una ficha sobre una película que vimos la semana pasada:"Ratoncito Pérez 2". No penséis que fue elegida al azar, fue la seleccionada porque llevamos una temporadita en donde casi todos los días hubo una caída de diente, incluso de dientes. Y entonces no pude resistirme. Quise disfrutar con ellos de la lógica irracional del ratoncito Pérez cuando dice:"...Las cosas pasan..." Me pareció una verdad tan simple y tan grande que a mí, personalmente, me serviría para resumir la esencia de una vida. Disfrutamos mucho viendo como uno de los protagonistas, Lucas, es capaz de "luchar" contra todos para defender lo que él cree que es, lo que realmente sabe su corazón, esa inteligencia natural que casi nunca se equivoca. Después de misterios y pequeñas derrotas su verdad salió triunfante. Creer de verdad puede ser el camino a muchas metas. Es una película infantil, no cabe duda, pero estoy segura de que con ella muchos adultos recordamos lo que fuimos, lo que, quizás, seguramente seguiremos siendo, niños sin niñez.